2. ¿Qué complementos utilizar con la hamburguesa?

Lechuga crujiente, rúcula, sabrosos tomates, queso Edam, Cheddar, Camembert, aros de cebolla, aguacate, pimientos, aceitunas y zanahorias: todos ellos son ingredientes que combinan perfectamente con la carne y los panecillos.

Un sabor más afrutado se consigue con el mango y la piña. Pero también se pueden añadir champiñones y espárragos para dar un toque más moderno. ¡Y, por supuesto, sin olvidarnos de las hierbas frescas y las salsas especiadas y condimentadas!

4. ¿Cuál es la guarnición idónea?

Si la hamburguesa va acompañada de una guarnición deliciosa, conseguirás un menú completo. Con patatas fritas va uno sobre seguro, pero también resultan deliciosos los gajos de patata crujientes, las patatas paja o sencillamente las patatas al horno.

Los nachos, el guacamole y la salsa picante convierten la hamburguesa en un deleite al estilo mejicano. Algunos prefieren degustarlas con patatas chips, mientras otros rematan el placer de comerse una hamburguesa con cebolletas, pepinillos en vinagre, mazorquitas de maíz encurtidas o lechugas de todo tipo.

Un último apunte sobre la salsa, que, por cierto, no se considera guarnición sino aderezo: además de los tradicionales ketchup y mayonesa, en el universo de las salsas encontramos otras recetas creativas que son muy apropiadas para dar un giro sorprendente al disfrute de una hamburguesa.